Una de las querellas en el juicio que investiga los abusos sexuales que salieron a la luz en noviembre de 2016 en el Instituto Próvolo de Mendoza (juicio III) pidió 25 años de prisión para la monja Kumiko Kosaka, única imputada en este debate, y 10 de inhabilitación para ejercer cargos en albergues educativos donde asistan menores, la misma condena que solicitó la fiscalía, informaron este miércoles fuentes judiciales.
El pedido fue realizado por el abogado Sergio Salinas (ONG Xumek) en el marco de la etapa de alegatos que transita el juicio por los hechos ocurridos en el exinstituto para niños sordomudos de Luján de Cuyo, que se desarrolla en el Polo Penal Judicial, ubicada en la capital provincial, y que continúa con otro de los abogados querellantes, Oscar Barrera, que cerrará su exposición mañana.
Salinas -quien concluyó su alegato este martes- solicitó para la monja Kosaka “la pena de 25 años de prisión y 10 de inhabilitación para ejercer cargos en albergues educativos donde asistan menores” en virtud de “la acumulación de los delitos que representamos en ese combo de causas por cuatro víctimas”, según explicó a Télam.
“Esta investigación llevó siete años. Esto comienza en noviembre de 2016, cuando una chica, que fue llamada como la testigo de identidad reservada número 1, realizó una denuncia con una lengua de señas muy precaria”, recordó el letrado.
“Con los meses de investigación empezamos a notar que había una monja que era mala (por Kosaka) y con el tiempo nos dimos cuenta que no era una monja mala en término de malicia, era una persona con indicadores de abuso sexual y que hacía propiamente ella los abusos”, agregó Salinas.
Etapas anteriores
El primer juicio fue un abreviado, el 25 de septiembre de 2018, en el cual el monaguillo Jorge Bordón y exempleado administrativo en el Instituto confesó la autoría de los hechos y recibió una pena de 10 años de prisión.
En tanto, el segundo, el 25 de noviembre de 2019, fue el que condenó a los curas Nicolás Bruno Corradi a 42 años de prisión y Horacio Corbacho Blanc a una pena de 45, mientras que el jardinero Armando Ramón Gómez recibió 18 años de prisión.
Este tercer debate, a diferencia de los anteriores, contiene tres causas acumuladas, por lo que habrá un alegato por cada una de ellas: en dos de los expedientes la única imputada es Kosaka, quien recuperó la libertad en junio de 2022 y cuenta con prisión domiciliaria.
“Se fueron juntando pruebas y ese caudal de pruebas llevó a mostrar la estructura tanto activa como omisiva del Próvolo, es decir, quien abusaba como quien permitía. En esa situación nos fuimos topando con que había una organización mucho mayor”, dijo el abogado.
Finalizada la jornada de hoy (de 9 a 13), el Tribunal llamó a un cuarto intermedio hasta el jueves, cuando tendrá lugar el alegato de cierre por parte del abogado querellante Oscar Barrera, y luego será el turno de los defensores de Kosaka.