Trece personas quedaron imputadas en la ciudad santafesina de Rosario por cinco homicidios, balaceras y atentados cometidos en cuatro meses como parte de una disputa interna “por diferencias económicas” de la narcobanda “Los Monos” y que se escenificó en la barrabrava del club Newell’s Old Boys, informaron fuentes judiciales.
Tras dos días de audiencia, un equipo de fiscales conformado para la ocasión terminó esta tarde de acusar formalmente a Pablo Nicolás Caminos, un joven preso por homicidio, de ser el presunto líder de una asociación ilícita que disputó a tiros la barra del club del Parque Independencia.
Según informaron fuentes judiciales, el juez de la audiencia, Héctor Núñez Cartelle, postergó la resolución sobre los pedidos de prisión preventiva de los acusados para el martes de la próxima semana.
Entre los hechos analizados durante las dos jornadas, los fiscales le achacaron a la banda liderada por Caminos –preso en la cárcel Rawson– la balacera al supermercado de José Roccuzzo, el suegro del capitán de la Selección Argentina de fútbol, Lionel Messi.
Ese hecho ocurrió el 2 de marzo pasado, cuando dos personas en moto dispararon 12 tiros contra el supermercado “Único”, comercio que es propiedad de la familia de Antonella Roccuzzo, la esposa de Messi.
La noticia de la balacera dio la vuelta al mundo y, según los fiscales, ese era el objetivo que perseguía Caminos, quien fue imputado como instigador del tiroteo al supermercado cuyos autores materiales aún no han sido identificados.
“Estos ataques armados tiene que ver con estas dos facciones enfrentadas de la misma banda criminal, donde una de ellas maneja la barrabrava de Newell’s”, dijo el fiscal Franco Carbone, uno de los integrantes del equipo del Ministerio Público de la Acusación (MPA), encargado de las investigaciones sobre balaceras.
Según la pesquisa, Caminos, que conforma una célula de la narcobanda “Los Monos” guiada también desde la cárcel por Ariel “Guille” Cantero, se enfrentó desde noviembre del año pasado a otro subgrupo de la misma organización criminal, encabezado por Leandro “Pollo” Vinardi; Carlos Damián “Toro” Escobar y Gerardo “Dibu” Gómez.
Fuentes judiciales indicaron que las tres últimas personas son las que conducen, en nombre de Cantero, la barrabrava “leprosa”, el club en cuyas inferiores justamente jugó Messi.
Carbone sostuvo que “el ataque al supermercado de la familia Roccuzzo buscó tener un alto impacto mediático, tratando de generar conmoción pública”.
Y agregó que “en ese contexto” la acción buscó “evidenciar esta rivalidad y generar notoriedad pública” mediante un hecho criminal.
“La familia no tiene que ver con el móvil del ataque, pero sí en visibilizar esta disputa interna”, explicó Carbone.
Según el equipo de fiscales, Caminos era el jefe de una asociación ilícita que, en el marco de esa disputa económica al interior de la banda conocida como “Los Monos”, organizó una serie de homicidios, balaceras, robos y ataques armados, en varios de los cuales dejó mensajes a través de carteles.
Los pesquisas ubicaron un escalón más abajo de la conducción a otro preso, Carlos Alberto Olguín, y a su pareja que estuvo en libertad hasta marzo, Antonella Fernández.
“La mayor cantidad de esos hechos han sido planificado por los referentes de estos sectores desde sus lugares de detención”, dijo en rueda de prensa el fiscal Luis Schiappa Pietra.
Por su parte, el fiscal Matías Edery explicó sobre la fracción que lidera Caminos que “era un grupo que en principio trabajaba dentro de Los Monos y que se escindió por diferencias básicamente económicas, como siempre en estos grupos, y ahí comenzaron a atentar”.