El seleccionado uruguayo Sub-20, flamante campeón de la categoría, recibió el apoyo de sus hinchas que colmaron el estadio Diego Armando Maradona de La Plata, en una jornada histórica para el fútbol de Uruguay.
La hinchada “Celeste” copó el estadio platense, con una concurrencia que superó los 38 mil espectadores, e hizo que el festejo fuese más efusivo luego del sufrido 1-0 ante Italia.
Las banderas uruguayas se multiplicaron en la final Sub-20, bajo un frío extremo que no impidió que la fiesta fuese completa en suelo argentino.
Los hinchas que “cruzaron el charco” revolearon lo que tenían a mano sobre las cabezas cuando el árbitro sueco Glynn Nyberg dio por terminado el partido, luego del aliento que realizaron en la previa y durante el desarrollo de la final.
El hincha uruguayo vivió el encuentro con intensidad. Con mucha expectativa en la previa, con esperanza cuando su equipo se mostraba mejor que Italia y con cierto grado de preocupación cuando los minutos transcurrían sin emociones.
Todos estuvieron identificados con algo. Ya sea un gorro, una campera, la camiseta celeste o bien con la de Nacional o Peñarol. El Diego Maradona se tiñó de celeste.
Uruguay se consagró campeón por primera vez en un Mundial Sub-20 y lo celebró por partida doble.